Domingo en La Canal
El toque de la corneta del druida
nos lleva hasta la época de los romanos, pero a un lugar muy concreto:
Palestina. En ese tiempo un personaje llamado Jesús de Nazareth predica de tal
manera que a muchos les cambiará la vida.
Este día lo vivimos a doble
ritmo:
Los mayores van de marcha al monte.
Un recorrido precioso en un día idóneo para caminar, no mucho calor y sin nubes para admirar desde los caminos que serpentean por las laderas gran parte del valle de Carriedo que se extiende a nuestros pies. Paseo entre prados y vacas, muuuuuuchas vacas. A media jornada tiempo para descansar y reponer fuerzas.
Y cuando llegamos a Aloños nos cobijamos en el pórtico de la iglesia donde pasaremos la noche; realizamos una descubierta para conocer el pueblo y los vecinos que nos acogen, y terminamos con la Misa en la parroquia, Eucaristía que hemos preparado con antelación. Después de la cena, antes de dormir, jugamos a la caza del zorro por el pueblo.
Un recorrido precioso en un día idóneo para caminar, no mucho calor y sin nubes para admirar desde los caminos que serpentean por las laderas gran parte del valle de Carriedo que se extiende a nuestros pies. Paseo entre prados y vacas, muuuuuuchas vacas. A media jornada tiempo para descansar y reponer fuerzas.
Y cuando llegamos a Aloños nos cobijamos en el pórtico de la iglesia donde pasaremos la noche; realizamos una descubierta para conocer el pueblo y los vecinos que nos acogen, y terminamos con la Misa en la parroquia, Eucaristía que hemos preparado con antelación. Después de la cena, antes de dormir, jugamos a la caza del zorro por el pueblo.
Los pequeños nos quedamos en casa
con diversas actividades. Con gymkanas y escenificaciones conocemos mejor el tiempo y las enseñanzas de
Jesús. Preparamos con cariño la Misa que compartimos con la gente que viene de
los pueblos de alrededor hasta el monasterio.
Por la tarde escenificamos algunas parábolas de Jesús.
Lo más divertido y refrescante fue cuando nos mojamos de lo lindo jugando a la guerra de los barcos.
Por la noche el juego de la caza del zorro no se extiende mucho: mañana hay que estar descansado para la marcha. Buenas noches.
Por la tarde escenificamos algunas parábolas de Jesús.
Lo más divertido y refrescante fue cuando nos mojamos de lo lindo jugando a la guerra de los barcos.
Por la noche el juego de la caza del zorro no se extiende mucho: mañana hay que estar descansado para la marcha. Buenas noches.
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