Campamento San Pablo

Regresamos al presente. Después de este viaje loco de trece días nos llevamos lo mejor de  todas las épocas, desterramos lo peor, y estamos dispuestos a construir un mundo mejor. Lo vamos a comenzar a hacer en compañía de quienes más queremos. De nuestras familias. Con ellas compartimos este día. Después de levantarnos un poco más tarde para descansar de la fiesta de ayer terminamos los preparativos para marchar, recogemos y limpiamos bien la casa y la campa, preparamos la Misa, y, ya todos juntos la compartimos. Es una celebración de agradecimiento y esperanza.  Después los papás ayudan a terminar de recoger las tiendas, y se distribuyen por el claustro para comer. Momento de compartir y de fiesta. Y más cuando llegan los monitores invitando a una copichuela y cantando coplas. Todos juntos celebramos una velada que causa furor, y en la que padres, monitores y acampados demuestran sus habilidades musicales. Y, antes de terminar el campa y cargar todo en el camión, como no podía ser de

Sábado. Penúltimo día. El final está cercano... Nos llora un poquito el alma. Y hasta el tiempo atmosférico nos quiere acompañar con una fina pero pertinaz lluvia... que por muy melancólica que sea nos moja las tiendas, y nos hace cambiar los planes que teníamos pensado realizar en la campa. Pero no importa. La Canal es grande y en su claustro entramos sin problemas. Esta mañana nos acompañaba un druida venido del futuro con su robot particular. Se han perdido de época y solicitan nuestra ayuda.  Durante el día ponemos nuestro empeño en ayudar a nuestros visitantes a regresar al futuro por medio de la maqueta de una máquina del tiempo que elaboramos gracias a diversas pruebas. Y como ya mañana nos tenemos que marchar empezamos a preparar las mochilas. Qué pereza.   Tenemos tiempo para escribir nuestra carta final del campamento, para hacer revisión. Al final todos hemos hecho méritos para recibir la llave del mañana. Qué bien. Por eso nos alegramos, e incluso nos emoci

No sabemos si lo sabéis, pero vuestros hijos ayer votaron por primera vez! Y escogieron a su representante, a su alcalde de la reciente creada democracia de La Canal, ¡Hicieron coaliciones y todo! Pero quizás basándose en lo que ven, prometieron cosas que luego... son complicadas de cumplir (Helados de postre todos los días, no más pescado, irse más tarde a la cama...) Y como no les alcanzaba el presupuesto para todo, un joven productor de televisión se fijó en ellos para hacer un nuevo reallity "El Campamento", tras llegar a un acuerdo con el alcalde, comenzó el espectáculo. algunos aguantaron media hora bailando por unas cuantas picotas y "un coche", se convirtieron en auténticos negociadores de productos de naranjas y han descubierto que el qué hacer en la vida es tan importante como el cómo lo hacemos... si ir a por nuestro objetivo sin tener en cuenta a nadie, o cooperando con los demás. Por la tarde estuvieron preparando la vel

Esta mañana de jueves un druida con acento gabacho nos ha invitado a viajar al tiempo de la Revolución Francesa cuando se logró que el pueblo eligiera a sus gobernantes. Por eso hemos podido elegir a nuestro alcalde, después de que varios candidatos nos hicieran sus promesas electorales y de que les hayamos votado. Ha sido un día caluroso que hemos aprovechado para jugar a la pista de agua y al vóley toalla. Una gozada porque los manguerazos y globos de agua nos han refrescado de lo lindo. Y más que refrescado, nos han dejado helados los  personajes que nos hemos encontrado esta noche en las estancias de nuestra casa… Espíritus venidos de un antiguo manicomio que han querido por una noche quedarse a vivir… o morir más bien, con nosotros.

Este miércoles continuamos en la misma época que ayer. La reina y los nobles parecen velar por el bien de sus súbditos, pero no todos están conformes... Aunque los diversos feudos se afanan en los talleres por realizar los escudos y lanzas para la reina, se avecina una época de penurias. La plebe se ve obligada a comer sin lo más elemental: cubiertos, sillas, mesas, mientras que la nobleza goza de privilegios como vasos, platos e incluso chorizo en los spaghettis. Las reacciones serán diversas entre los más pobres, desde la solidaridad a las airadas protestas, y entre los nobles, algunos preocupados por los otros, y otros presumiendo de lo que derrochan... Todo ello se reflexionará posteriormente en los grupos. Los feudos pretenden que su doncella sea la que alcance el favor del príncipe casadero. Por eso disputan entre ellos un reñido torneo. Al final será doña Mencía de Suavia la elegida, que contrae matrimonio con