Una aventura de cine

Un año más comienza una nueva aventura, los campamentos San Pablo. Una aventura de cine es el lema de este año pero antes de pensar en este campamento vamos a repasar un poco la historia de nuestros campamentos.

Llevamos 29 años haciendo campamentos. Hemos estado en muchos lugares de la provincia de Burgos y de provincias cercanas. Arroyo de Valdivielso cuatro veces, Retuerta, Cascada de Tobazo, Monterrubio de la Demanda dos veces, Barbadillo de Herreros, Críales dos veces, Valdelateja, San Martin de los Herreros dos veces, Moradillo del Castillo, Quintanaopio, Loma de Montija, Torme, Rozas de Valdeporres, Pradoluengo, Vallejo de Orbó tres veces, Huerta de Rey dos veces, Poza de la Sal dos veces y La Vecilla de Curueño.

“Desde hace casi mil años, nadie lo pudo evitar, se nos metió en la cabeza el acampar.” Con esta frase empezaban siempre los campamentos de la parroquia y la verdad es que, aunque el número mil parece muy pretencioso, se va por el buen camino ya que este año es el número 29.

Intentar resumir en unas pocas palabras los hechos, vivencias y experiencias que han sucedido estos años no es fácil, pero aun así habrá que intentarlo.

La Parroquia San Pablo y la Asociación Juvenil San Pablo se encuentra en el barrio de Gamonal, más concretamente en la Plaza Roma y lleva en ese lugar rodeado de grandes bloques de pisos bastantes años.

Aunque el primer campamento fue en el año 1983 en Arroyo de Valdivielso, esta aventura de los campamentos empezó a gestarse por 1980 cuando un grupo de jóvenes de edades comprendidas entre 16 – 18 años empezaron a prepararse para algo diferente y trabajar con los niños y adolescentes que se acercaban a la parroquia. Fruto de esa semilla de juventud, ganas e ilusión, se Septiembre de 1982 nace la idea de organizar el que iba ser el primer campamento de la parroquia.

Como suele pasar en casi todas las cosas, lo más difícil fueron los comienzos, ya que se pretendía realizar la actividad partiendo de cero, careciendo tanto de recursos económicos como materiales.

Desde ese primer campamento de 1983 hasta el que se celebra este año 2011 han pasado 29 años, aunque como tal han sido más, ya que con el paso del tiempo la actividad fue consolidándose y mejorando, llegando algunos años a tener que hacer dos turnos, un campamento de pequeños (8 – 13 años) y otro de mayores (14- 18 años) por lo que haciendo cálculos podemos decir que se han hecho unos 39 campamentos en los que han participado acampados, monitores, cocineras y sacerdotes más de 2000 personas.

Esto ha sido un resumen de los 28 años, pero ¿Cuál es la esencia de los campamentos?, ¿Qué es lo que ha hechos que durante 28 años y esperemos que por otros muchos más, un montón de personas diferentes hayan querido participar de alguna manera en esta aventura?, ¿Dónde reside la magia?

La respuesta a estos interrogantes podría encontrarse en las actividades y talleres diferentes que se hacen, o en las risas, las bromas o quizás dormir 13 días fuera de casa, pero lo más importante es porque en los campamentos convivimos como una gran familia. La mayoría de la gente que va a los campamentos son personas del barrio, vecinos, compañeros del colegio, que aprenden a convivir juntos. Personas entre las que nacen relaciones de amistad y de respeto que perduran en el tiempo. Personas que, aunque por circunstancias de la vida pierdan el contacto directo o ya no vivan en el barrio, cuando coinciden se siguen reconociendo, saludando y en ocasiones se paran hablar y a charlar de sus vidas; amigos entre los que siempre queda el recuerdo de las experiencias vividas en los campamentos.

En breves días comenzara una nueva aventura, cargada de ilusión y mucho trabajo. Continuemos escribiendo Nuestra historia…